COSTUMBRES DE NUESTROS PRIMOS DE CHILE

Los primeros Gitanos que pisaron territorio Chileno (año 1900) fueron unos pocos que provenían desde Europa, específicamente desde la ex-Yugoslavia (Serbia). Recorrieron gran parte de Sudamérica, siendo Brasil su primer país, visitado luego, Argentina, Ecuador, Perú, Venezuela, y por supuesto Chile. Luego de estar en Brasil y radicarse un tiempo en el Ecuador y otros países sudamericanos por más de 5 años, la gran mayoría de los gitanos Xoraxajo o Jorajano decidieron emigrar a Chile (1905). Desde esa fecha, ya han pasado 5 generaciones de gitanos por nuestra tierra y se estima que en la actualidad llegan a los 5.000 viviendo en Chile.

NACIMIENTOS

Jamás un gitano podrá bautizar a su hijo antes de nacer. Y si tiene algún nombre pesando, sólo podrá decirlo el día en que llegue al mundo. Esta es una de las creencias más arraigadas de este pueblo, donde una vez ya nacido el niño o niña se esperan 3 días. Luego se le avisa a toda la familia y a gran parte de la colonia que un nuevo integrante ha llegado a este mundo. Siempre al tercer día se organiza una fiesta de bienvenida, donde se le da un nombre al bebé, se festeja en honor del recién nacido y se le regalan pequeñas sumas de dinero, más que nada simbólicas para la compra de sus enseres. Y sobre el nombre, se les avisa a los familiares más cercanos siempre en forma directa, puerta a puerta, bendiciendo la casa visitada con algunas gotitas de agua bendita e invitando a la fiesta de bienvenida del bebé.

MATRIMONIOS

Los matrimonios han mantenido casi la misma temática por años, salvo pequeñas excepciones e innovaciones. Duran por lo general 3 a 4 días. Además los días previos, que son de preparativos, también son considerados como de fiestas en algunos casos, llegando superar los 7 días de festejos.

Durante la ceremonia, el padrino junto a varias mujeres (por lo general solteras), parten desde la chara (carpa) del padre del novio, en una caravana todos tomados de las manos, cantando y bailando, con una bandera que sirve de señal al resto de los invitados. Se dirigen a la chara de la novia. Una vez que llegan a su destino y después de una breve discusión con los familiares de la novia (más que nada ritual y simbólica) toman a la novia y se la llevan de vuelta de igual manera.

Luego en la chara del novio, se junta al novio y la novia y se procede a la ceremonia que no dura más de 5 minutos (la novia pasa 3 veces por debajo del brazo del novio). Luego todos los invitados reciben un pañuelo en señal de asistencia al evento. Además los invitados le regalan a la pareja recién casada, pequeñas sumas de dinero (acto solamente simbólico).

Durante el tercer día de fiesta se realiza la inauguración de la nueva chara de los novios y al día siguiente se inaugura la chara de los recién casados. Esta fiesta es más íntima, asisten generalmente la familia más directa de la pareja.

Las parejas de novios la mayoría son siempre jóvenes. El promedio de edad de los novios fluctúa entre 18 a 21 años y en algunos casos, menores.

VIRGINIDAD DE LA NOVIA

El cuarto día de fiesta es muy importante, ya que se debe demostrar la virginidad de la novia. Esta fiesta es exclusiva de las mujeres.

En esta cultura la virginidad es primordial en la mujer y se tiene que demostrar con pruebas fehacientes (se debe mostrar señas o vestigios, en la ropa interior de la novia), las que son certificadas por las mujeres más antiguas de la colonia.

En el caso de no demostrarse la virginidad de la novia y si el novio lo exige, el matrimonio queda nulo. La familia de la novia debe cancelar todos los gastos de la fiesta, en los que incurrieron los padres del novio.

El divorcio también está permitido, sólo es necesario que una de las partes desee terminar el vínculo, convoque al tribunal gitano (kriss) y que dé buenas razones para su decisión. Las causales pueden ser la infidelidad, maltrato, abandono o la falta de amor.

No están permitidos los matrimonios mixtos, es decir, no se permite casarse con gente que no pertenezca a la colonia gitana. Si se diera el caso, se castiga con un destierro temporal o definitivo, dependiendo mucho de la pareja no gitana y su adaptación a las costumbres.

FUNERALES

Cuando llega el momento de que algún ser querido parta de este mundo, en la mayoría de las culturas siempre son los familiares más cercanos y amigos los que presentan sus respetos acompañan y despiden al difunto. En el caso de los gitanos, gran parte de su colonia se hace presente con sus respetos. No importando si fuera familiar o no.

Los velatorios son por lo general de hasta 48 horas y es luto obligado para todos. Mínimo 2 días en el caso de no ser familiar, al ser familiar de la persona fallecida son 7 los días de luto obligado; 40 días, si fuera familiar cercano, y de 6 meses a un año al ser familiar directo. El luto se lleva de la siguiente manera: En el caso de los hombres. No afeitarse (dejarse barba) por las fechas antes mencionadas. En el caso de las mujeres. Vestir de negro o usar pañuelos negros, no usar maquillajes en iguales fechas. En general y para todos. No encender televisores o radios, no escuchar música, no asistir a fiestas ni eventos masivos. Siempre respetando las fecha antes mencionadas.